Cuando tenía nueve años escribí un poema sobre una niña solitaria. Papá y mamá me animaron a continuar escribiendo. Todo mi recorrido académico sirvió a mi preparación como poeta. Con veinte años publiqué un poemario que hablaba de la soledad de una estudiante modelo. Gané un premio literario. Ahora, con veinticinco, he prometido que escribiría otro libro.
nueve años
veinte años
otro libro.