¿Por qué no sales nunca a jugar con nosotros? ¿No te aburres en casa?

Vamos a ir al parque a hacer volar las cometas nuevas.

Vente, anda. Siempre podrás seguir leyendo esos cuentos raros más tarde.
No quiero ir. Nadie me entiende.
Los poemas son mi refugio.
VOLVER