Odio vivir en una calle céntrica.
Me recuerda que otros están fuera, en libertad.
Y yo vivo encerrada en un cubículo de 9 metros cuadrados y escribiendo a la luz de una vela porque no puedo pagarme la electricidad.

¿Escribiendo? ¿Haciendo ver que escribo?

Solo veo imágenes y todas ellas son oscuras y cotidianas.
encerrada